miércoles, agosto 07, 2019

La Provenza Francesa: En busca de campos de lavandas Episodio 3

"Sur le pont d'Avignon
On y danse, on y danse
Sur le pont d'Avignon
On y danse tous en rond
Les belles dames font comme ça
Et puis encore comme ça"

Cuando elegimos la Provenza francesa en nuestra hoja de ruta por el sur de Francia, fuimos en busca de la ruta de Van Gogh , de los girasoles 🌻 y los campos de lavandas. Pero también detrás de la mirada del genial artista , de sus paisajes, de sus cielos y sus encantadores poblados campesinos y medievales. Y la Provenza nos regaló eso , nos cumplió un sueño y mucho más. Para mi hasta el día de hoy el lugar más hermoso que haya visto en Francia. ¿ qué es lo que hace que un lugar se convierta en algo amado? Yo no tengo la respuesta, pero sé que allí vibraba al mismo ritmo y al primer campo de flores silvestres multicolores descubrí la sencillez de lo perfecto. Este posteo habla de nuestra visita a Arles, llegamos allí para visitar el café llamado La Nuit que pintará con su increíble paleta de colores. Nos sentamos en una de las mesas, y disfrutamos del entorno casi como si hubiéramos estado dentro del cuadro. Si pudieras elegir estar dentro de una de las obras maestras de la pintura ¿cual elegirías?
Pero la ciudad es mucho más que el café de Van Gogh . Arles es una ciudad ubicada en el río Ródano, en la región de la Provenza, en el sur de Francia. Es conocida por inspirar las pinturas de Van Gogh. Pero además Arlés fue capital provincial de la antigua Roma, así que también destaca por las ruinas de dicha época. Pero nosotros llegamos el viernes 29/6 a la hora que comenzaba una fiesta tradicional llamada : La Pegoulado todas las tradiciones de la Provenza se reúnen esa noche en Arles, para desfilar a la luz de los “pegos” (farolillos) y al son de los pífanos y de las flautas provenzales. Los grupos y las escuelas de danzas tradicionales realizan, a lo largo de este desfile nocturno, las danzas que sus antecesoresles han enseñado. Esta fiesta popular permite a todos aquellos que llevan el traje tradicional reunirse y compartir su pasión común.

El desfile se acaba en el anfiteatro con una gran fiesta La Pegoulado tiene lugar el viernes que precede a la Fiesta del Traje y reúne a un millar de participantes. El desfile de animales de granja con los trajes típicos de todos los participantes es asombroso. Y Wally se sumó gracias a la buena onda de los locales que nos hicieron vivir una experiencia memorable. A nosotros estas vivencias nos fascinan, mucho más que encontrarnos frente a grandes atracciones. Esto de vivir la cultura desde adentro y cuando además nos toma por sorpresa es muy enriquecedor. Fuimos felices esa tarde/noche en Arles y consideramos una ciudad imperdible del recorrido provenzal .



Continuamos nuestra roadtrip en dirección a la ciudad de Aviñón. Es la una ciudad estratégicamente ubicada en el recorrido de la  francesa. Nosotros lo utilizamos de base durante dos días. Si bien la ciudad no es la más encantadora de la zona, su puente es uno de los más famosos dada la canción en la que todos cantan y todos bailan. Quien no la ha cantado alguna vez? En toda la zona utilizamos hoteles sobre la ruta, a dos o 3 km de las ciudades o cascos históricos, con estacionamiento gratuito, de distintas cadenas, que son económicos y prácticos cuando uno lo único que busca es una buena ducha y colchón por la noche después de largos roadtrip . En este caso fue el Premiere Classe pero también hay otros. Desilusiona un poco ver que el puente está roto, y que no llega a la otra orilla. La ciudad es muy bulliciosa y animada. Tiene mucha vida nocturna y una noria impactante. Aquí en Argentina siempre las llamamos “Vuelta al Mundo”.

A la mañana siguente salimos a la ruta con destino a Fontaine de Vancluse, un pueblo muy pequeño pero que había descubierto en mis investigaciones de lugares en la zona a través de Instagram. Las fotos me cautivaron y fuimos con mucha expectativa. Dejamos el auto bastante lejos y decidimos caminar por la orilla del Rio Sogues algo que fue un acierto. Era una mañana soleada y cálida por lo cual la arboleda del camino resultó una bendición. Caminamos unos díez minutos, cada tanto había alguna casa a la vera del río y en un momento luego de cruzar un puente vimos el sector de parking que anunciaba que estábamos llegando.


Lo primero que vimos al ingresar fue un monumento muy importante al poeta Petrarca que vivió allí durante muchos años sólo con el objetivo de conquistar a una dama a la que le escribio mas de trescientas cartas....nosotros bordeamos caminando el río que fluye con el impetu de aquel amor no correspondido, y fuimos entrando a un exquisito paisaje provenzal.  El sonido del agua va aumentando cuando llegamos al corazón del lugar donde nace el río.

Fontaine-de-Vaucluse sigue la intriga de atraer a los visitantes. Desde la antigüedad, la asistencia del lugar es muy importante. Los recientes descubrimientos arqueológicos  dan fe de un culto de esta fuente de toda la antigüedad. Al final de un desfiladero estrecho y verde a los pies de un acantilado esculpido por la erosión, uno de los manantiales de los ríos más hermosos del departamento: la-Sorgue, a pocos metros de la pintoresca localidad que tiene el Valle su nombre. Las aguas obligados a venir Fontaine-de-Vaucluse de la infiltración de agua de lluvia y nieve de fusión en el sur del monte Ventoux, los Montes de Vaucluse, la montaña Lure, gargantas del Nesque que representa una "captación" de 1.240 km ², cuyo único resultado es la fuente. En todas las estaciones, las fuentes secundarias de alimentación de la Sorgue, que forma un hermoso lago sombra de los plátanos antiguos. La intensa belleza de este paraje natural atrae a muchos visitantantes, pero no tanto como para sentir que es demasiado turístico.
Visitamos la Iglesia de Veran construida en el siglo XI sobre el antiguo priorato del siglo X donde se encuentran sepulcros de varios santos.
Luego caminamos por los senderos cuyo paisaje está protagonizado por el agua y un entorno absolutamente bucólico.
La energía que vibra nos acompaño mientras nos despedimos hacia la siguiente parada que sería

Gordes: un pueblo colgante considerado de los mas bonitos de Francia.
Un pueblo colgado de una colina, asomado a ella, entre un paisaje de valles y montañas.
Un pueblo construido a base de piedra clara y uniforme, que le da un aspecto rústico, antiguo y acogedor.
Un pueblo coronado por una iglesia y un castillo monumental, que nos lleva a pensar en batallas medievales, aventuras, caballeros y leyendas.
Desde el Valle del Calavon, Gordes ofrece una imagen imborrable. Ni pintoresca ni exótica, pues el modelo se repite por todo el sur de Francia y por Italia entera. Pero sí perfecta. A Gordes no le falta nada. Es el típico pueblo medieval, elevado y fortificado, que ha conservado su esencia y su belleza.
Un pueblo colgado de una colina, asomado a ella, entre un paisaje de valles y montañas.
Un pueblo construido a base de piedra clara y uniforme, que le da un aspecto rústico, antiguo y acogedor.
Un pueblo coronado por una iglesia y un castillo monumental, que nos lleva a pensar en batallas medievales, aventuras, caballeros y leyendas.
Desde el Valle del Calavon, Gordes ofrece una imagen imborrable. Ni pintoresca ni exótica, pues el modelo se repite por todo el sur de Francia y por Italia entera. Pero sí perfecta. A Gordes no le falta nada. Es el típico pueblo medieval, elevado y fortificado, que ha conservado su esencia y su belleza.Cuando nosotros llegamos era junio de 2018 mas exactamente el día del partido en que Francia eliminaría del Mundial de futbol de Rusia a Argentina.
Había un solo bar con televisión y estaba colocada hacia afuera y alrededor de ella, casi todos parados se agolpaba un puñado de franceses alentando su selección. Algunso turistas que miraban la escena como parte de un show y nosotros dos argentinos mirando el patido con ellos. No fue muy amable la actitud pero básicamente nos ignoraron. Cuando hizo el primer gol Francia dedicí dejar a Wally con su mezcla de esperanza y masoquismo y busqué me fui a caminar por el pueblo en el que no había nadie, sus escasas docena de calles estaban abandonadas al tremendo calor del mediodía vacias. Hasta que dí con un restaurante , también vacio, y entre. El mozo me explicó que estaba cerrada la cocina....y le dije si podía tomar una copa de vino y me dijo que sí. Me sente sobre un ventanal que daba hacia el abismo que era un paraiso y tomé mi copa de vino rosado con unas olivas muy bien condimentadas mientras via whatsupp me notificaba de los goles que seguí haciendo Francia aunque los gritos y cánticos a la distancia me lo anticipaban.


Cuando terminó el partido recorrimos el pueblo y volvimos a partir hacia la provenza profunda en busca de los campos de lavanda.

Allí entre los Macizos de Luberon encontramos a la Abadía de Senanque. Nace como comunidad de monjes cirstercienses en 1148.  Consagrada en 1178, conoce su máximo esplendor del siglo VIII al siglo XIV, llegando en poseer cuatro molinos, siete granjas y numerosas tierras en Provenza. Luego tiene una larga historia de guerras y cambios de monjes. La iglesia, construida en forma de cruz de tau con un ábside que se proyecta más allá de las paredes exteriores de la abadía, es extremadamente austera, como es típico en los edificios cistercienses. El claustro es el lugar de paso que comunica las diferentes partes del monasterio. La sala capitular, gracias a las seis bóvedas de cruz ojivales, se caracteriza por la fineza de su acústica (era la única estancia donde se permitía hablar), con el abad en el centro y la tarasca, figura del demonio, esculpida en el claustro delantero.
Un hecho inusual es que su extremo oriental litúrgico mira al norte, pues el valle estrecho y aislado en el que se encuentra no ofrecía ningún espacio para la disposición convencional.


Es hermoso recorrer sus sembrados de lavandas y girasoles y también verla desde la perspectiva de la altura . El ingreso a la abadía es gratuito y tienen una tiende de productos que ellos producen. .Esta visita fue la visita perfecta como antesala a recorrer los inmensos campos de lavandas. Para quienes desean visitarlos la provenza ofrece distintas zonas y épocas. La zona de Gordes florece segunda mitad de junio y primera de julio. Nosotros nos cansamos de recorrer campos de lavanda donde caminamos y tomamos la clásicas fotografias.




miércoles, abril 24, 2019

Tesoros de la Provenza Francesa . Episodio 2


“Cuando siento una necesidad de religión, salgo de noche y pinto las estrellas”. Van Gogh

Muy temprano nos fuimos de Aix en Provence en dirección a Avigñon, allí haríamos base para recorrer distintos lugares provenzales que nos interesaban. Las motivaciones mas importantes eran seguir los caminos de Van Gogh y visitar los campos de lavandas. Todo aquello resultó mucho mas intenso de lo que pensábamos. Esta región del sur de Francia entre los pequeños Alpes y el Mediterráneo es francamente inagotable. Todo es bello e interesante y creo que no es difícil entender porque grandes artistas , tanto pintores como escritores la eligieron para inspiración
durante muchos períodos de su vida.
El sol en verano es verdaderamente intenso y luminoso. Los colores son muy encendidos. Los campos a la vera de las rutas llenos de flores silvestres multicolores entre las que revolotean mariposas hacen la delicia de los trayectos.
A esta altura del camino elegimos mas de una vez no usar las grandes autovías. Ademas de ahorrar

algunos euros el enclave de las rutas internas , todas perfectamente asfaltadas y señalizadas, nos permitieron disfrutar de cosas que no hubieran sido posibles. Como detenernos a tomar un café en pueblos medievales donde el turismo masivo no llega y disfrutar de la pattiserie del barrio.

Nuestra primer parada prevista en nuestra hoja de ruta fue : Les Baux de Provence. El pueblo medieval de Les Baux-de-Provence se alza en mitad de la carretera que cruza las colinas de Les Alpilles muy cerca de Saint Remy de Provence.

Entre Aviñón, Aix-en-Provence y Marsella, la llanura que nace en el Ródano sólo es rota por estas pequeñas estribaciones de los Alpes, Les Alpilles y su continuación el pequeño Macizo del Luberon ( allí llega riamos unos días despumes en busca de campos de lavandas).
Muchos pueblos provenzales y la naturaleza son atractivos en la zona pero Les Baux de Provenza se lleva el premio al mas visitado.  En primer lugar gracias a su entorno escarpado y abrupto, al que se llega por una corta pero dura subida a través de los pinares y las afloraciones calcáreas. La piedra fue explotada hasta el siglo pasado y aquí el geólogo Pierre Berthier descubrió el mineral que nombró bauxita en honor al lugar de su descubrimiento en 1821.

En segundo lugar su historia, fortaleza medieval de importancia que sólo será desmantelada en el siglo XVII por Luís XIII. De este período quedan numerosos monumentos como el castillo ducal y las murallas y torres defensivas. Y en tercer lugar por la cultura y las referencias artísticas que les Baux de Provenza han provocado en literatos, músico y artistas.

Los poetas y novelistas provenzales del XIX  investidos por el romanticismo cantaron odas al pasado medieval. En mi opinión diré que no defrauda pero que es un lugar en junio sobreexplotado por el turismo y entonces suele ser difícil disfrutar el lugar. Ya no podría un poeta permanecer allí entre medio del gentío escribiendo lírica bucólica seguramente. Pero el pueblo es precioso y no puede faltar si vienen por la ruta de la provenza.



Luego de una recorrida bajo el rayo del sol provenzal del último día de junio retomamos camino para detenernos unos kilómetros adelante en lo que forma parte de Saint Remy pero está sobre el camino. Me refiero a Glanum,


Glanum fundada en el siglo VI aC se convirtió en una ciudad formalmente Romana en el siglo 27 aC y abandonada en el siglo 260 dC. Se encuentra en un flanco de Les Alpilles (los pequeños Alpes) Estos dos monumentos romanos del siglo I aC se conocen como Las antigüedades y son Mausoleo de los Julios ( del 40 a C y un Arco del Triunfo (el más antiguo de Francia) y en él se o Les Antiques muestran relieves de la Galia vencida, con representaciones de hombres y mujeres celtas encadenados, o un personaje galo-romano, vestido con toga romana y una túnica gala, que muestra al público a un guerrero galo encadenado. La ornamentación está también acompañada de frutas y follajes, símbolos de la abundancia. Es difícil explicar la sensación que representa estar frente a ellos rodeados del paisaje provenzal. Existe una excavación arqueológica muy cerca que puede visitarse pero Les Antiques son la gran atracción. Por su estado de conservación después de más de dos mil años y también porque allí erguidos frente al mundo nos recuerdan que alguna vez los hombres que pasaron por el mundo quisieron dejar su huella y su legado con mucha determinación. Tanta...que nada los derribó. Será que aún tienen mucho que enseñarnos.
En principio a respetar la memoria de nuestros ancestros.

Este sitio nos impactó muchísimo, además de ser los únicos que caminábamos por allí tuvimos la tranquilidad de observar cada detalle con asombro y fascinación. Una vez mas es imposible no sentir que todos somos un poco romanos en este lado del mundo. Y el sentimiento provoca una mezcla de orgullo y emoción



Nos fuimos de allí e ingresamos a la ciudad de Saint Remy de Provence sin rumbo y nos perdimos caminando entre las calles de su centro histórico y de pronto en el número 6 de la Rue Hoche encontramos una placa recordatoria frente a la puerta de una casa donde nació Michel Nostra Damus mas conocido por sus profesias de Nostradamus. Que además fue médico, astrónomo y astrólogo, un hombre de ciencias de su época.  Afortunadamente las calles estaban casi vacías porque ya el sol del mediodía se hacía sentir. Las tiendas dentro del enclave medieval son encantadoras. Nos detuvimos a almorzar un menu de mediodía en un lindo bar frente a la plaza de la ciudad y con 14 euros disfrutamos de la excelencia de la cocina francesa. Luego decidimos ir caminando al lugar que nos había llevado hasta allí, aproximadamente unos dos kilómetros que resultarían tan inolvidables como conmovedores. 


El camino marcaba hacia afuera del centro una ruta señalada con reproducciones de cuadros de Van Gogh frente a paisajes que él había pintado y también con unos botones de bronce en el empedrado con el nombre "Vincent". Todo indicaba que estábamos en el camino correcto. 



Cuando Vincent pintó "La noche estrellada" se encontraba ingresado en el hospital para enfermos mentales de Saint Paul de Mausole, situado al sur de Saint Rémy justo a los pies de la cadena montañosa de los Alpilles. Allí llegamos en nuestro periplo por la Provenza Francesa. 

Porque nuestra meta principal era seguir la ruta de los impresionistas pero fundamentalmente de Van Gogh. Hemos tenido el privilegio de ver la obra original en Nueva York . En esta oportunidad estuvimos en la habitación donde la creo. Allí se conservan los austeros muebles y su atril con los óleos resecos.
Nos conmovió profundamente cada tramo de esta ciudad que permite ver los paisajes que inspirarán al genio holandés. 

La luminosidad del sol en el sur de Francia explica en parte esos estallidos de color en su arte. Aún recuerdo mirar por la ventana de su dormitorio el jardín de lavandas y sentir
una emoción tan profunda...es inevitable pensar que sus ojos ponían la mirada allí! El arte lo trasciende todo...época, historia y el capricho de un segundo eterno y frágil. Como no amar el arte! Como no amar la vida ! un eco de cada artista que deja una huella de belleza en este mundo! 
No hemos vuelto a ser los mismos después de aquel día porque de algún modo si un viaje te modifica es porque te vuelve mas universal, mas amplio, mas humano. 
Retornamos un poco cansados la senda hasta el auto (unos 4 kilómetros), incluso hicimos dedo pero nadie nos levantó, algunos autos eran muy sofisticados. Sin embargo estábamos exultantes de felicidad y cansancio. Nuestro camino seguía hasta Avignon pero nuestro corazón por unas horas siguió latiendo en aquel dormitorio donde el genial pintor holandés observaba entre la locura y la luz desde su ventana la noche estrellada. 

Les dejo un video de unos minutos referente a los lugares que describimos en este posteo. 










miércoles, abril 10, 2019

Aix en Provence: La provenza francesa. Episodio 1


 “Ni yo ni nadie puede recorrer ese camino por ti. Habrás de recorrerlo tú mismo.”
Walt Whitman


Nos fuimos de la Costa Azul hacia nuestro primer destino en la provenza francesa. La Provence está ubicada en un lugar de privilegio. Con el Mar Mediterráneo a sus pies, se extiende hasta los Alpes y posee un microclima ideal para la pesca y el cultivo de la vid, los olivos y las lavandas. 
En este caso, una puerta de entrada a la famosa zona. Era la ciudad de  Aix en Provence y nos alojamos como todo este largo road trip en hoteles alejados un par de kilómetros de los cascos históricos básicamente por dos motivos: el estacionamiento gratuito y la relación costo beneficio. Finalmente uno llega a última hora del día para dormir y ducharse. Muchos de ellos tienen una recepción de 24 horas pero sin personal, con un código y el número de reserva se realiza el check in en una maquina estilo cajero automático. 

La mayoría cuenta con maquinas expendedoras de bebidas y snacks. 
Aix en Provence es una ciudad que nos sorprendió muchísimo, porque la elegimos por una cuestión estratégica en nuestro mapa de ruta. 
Allí nació Cezanne y se puede visitar el taller donde pintaba. Nos perdimos caminando en la parte antigua y a medida que transcurría el final de la tarde era como retroceder en los siglos. Por momentos no había ni siquiera un susurro y de pronto un plaza con mucha movida musical y bares con encanto.  Es una ciudad universitaria y eso hace que al caer la noche se pueble de jóvenes que contrastan con el estilo barroco urbano. 

Lo primero que nos llamó la atención fue la cantidad de fuentes, de hecho se la llama "La ciudad de las mil fuentes", en cada esquina prácticamente hay una, en algunos cruces son mucho mas destacadas. La plaza del ayuntamiento es el núcleo de la ciudad y en ella destacan tres iconos de la villa: el ayuntamiento (por supuesto), una fuente y el salón del grano. Aunque lo que mas nos llamó la llamará la atención es la Torre del Reloj, a uno de los lados de la casa consistorial. En su frontón triangular que culmina el “Halle aux grains”, con su alegoría de los ríos Ródano y Durance.
Aix está construida sobre una antigua ciudad romana que se asentó aquí atraída por sus aguas termales (y seguramente por la belleza del entorno). Queda poco de Aquae Sextiae aparte de los restos de las termas pero la Catedral de San Salvador se levanta sobre el antiguo templo romano de Apolo. Se construyó entre el siglo V y el XVII y en ella hay partes románicas, góticas y barrocas. Lamentablemente no la encontramos abierta. 

Siempre hay vestigios romanos pero en esta zona son muchos y algunos muy sorprendentes. 
Nos detuvimos en la plaza D´Albertas 
Al circular por la calle rue d'Espariat, uno no espera encontrarse en el patio de un castillo. La plaza de Albertas con su fuente, sus calles empedrado y redondeado, y sus grandes edificios con aires reales, es diferente de otros lugares en Aix. Es verdad que en muchos lugares hay fuentes. Pero la forma cuadrada de la plaza le da un toque particular, porque uno tiene la sensación de estar aislado de la ciudad, como protegido por murallas

Es uno de los rincones de Aix en Provence más bonitos y con más encanto, la armonía de la arquitectura barroca y ese ambiente decadente de los edificios y la fuente acabados en 1745 para el marqués de Albertas, tiene cierto gusto parisino. Por otro lado había músicos tocando y mientras los escuchábamos traté de imaginarme a aquel marqués.. Dueño de los palacios que nos rodeaban había decidido demoler todo lo que estaba en el medio para tener un patio interior con una fuente. No estuvo nada mal.....hoy es un imperdible de la ciudad. Llegamos exactamente un jueves día que en verano se puede disfrutar de estos espectáculos en el marco del ciclo." Les Jeudis d Albertas". 
Nos fuimos tarde y rechazamos una invitación a una trasnoche de fiesta y jazz en una vieja casona porque al día siguiente estaríamos temprano en la ruta.....así de amigable es esta ciudad, imposible irse sin sentirse agradecido. 
Les dejo un video de pocos minutos para que caminen por la ciudad junto con nosotros!




Nos alojamos en el Ibis budget Aix en Provence 
10, rue du Lieutenant Parayre / Pole d'activité, Aix-en-Provence

miércoles, marzo 27, 2019

Mónaco un principado de lujo y ostentación

"Hay que dejar la vanidad a los que no tienen otra cosa que exhibir."
Honoré de Balzac (1799-1850) Escritor francés.


Temprano llegamos a la Gare de Nice Ville donde tomaríamos el tren a Montecarlo. Desayunamos en la sucursal de Paul , una cadena de cafeterías francesa con precios accesibles y deliciosas croissant. Y emprendimos rumbo al principado de Mónaco. La mañana anunciaba un día de sol pleno y mucho calor. Mónaco esta apneas a 20 km de Niza pero que suelen ser en auto fatales. Es mucho el congestionamiento y en tren se demora unos 30 minutos.
Poco después de las 9 hs estábamos bajando en la Estación Montecarlo, Desde allí hay caminamos por la calle Grimaldi hasta la Plaza de Armas de Mónaco con la intención de subir al Palacio del Principe. 
Es el segundo país más pequeño del mundo (el primero es el Vaticano), y como paradoja, es el primero en densidad de población. Un tercio de su población está formada por millonarios según las estadísticas....y realmente es fácil notar en cuanto uno pisa suelo monagesco. 

Hoy en día, Mónaco es un país independiente con una estrecha relación con Francia. A pesar de no formar parte de la Unión Europea sí ha aceptado el Euro como su moneda oficial. El especial régimen fiscal del Principado ha atraído numerosas fortunas a su territorio, que son las que configuran el ambiente propio de la ciudad. Y es que los monegascos no pagan impuestos lo que favorece que tengan el ingreso per cápita más alto del mundo.
La plaza de armas es un lugar muy animado con un mercado de flores y frutas frescas, muchísimos puestos de souvenirs y algunos bares de paso. Recorrimos el lugar y comenzamos el ascenso hacia el palacio. La subida es bastante importante, el calor era intenso al igual que el azul del cielo. A medida que fuimos ascendiendo las vistas se volvieron de película. Los puertos de yates , el Mediterráneo, los Alpespequeños y la edificación de Montecarlo eran una postal. Cada tanto nos deteníamos a tomar fotografías....y a descansar un poco porque no decirlo!




Palais Princier

Al llegar a la plaza que rodea al Palacio del Principe, fuimos a sacar los tickets para visitarlo.  El Palais Princier, es sede del gobierno de Mónaco. Esta construcción data del siglo XVI y está protegida diariamente por carabineros franceses, además de cañones donados por Luis XIV.

La visita no permite fotos ni videos dado que allí se aloja el Principe Alberto II y que es sede de su gobierno. Pasados más de 700 años de su construcción, el Palacio presenta al ser objeto de refacciones y anexados de nuevas construcciones,  una peculiar mezcla de estilos y decoraciones. Como partes destacadas están: Hoy en día es posible admirar los fastos de este palacio, por ejemplo el Patio de Honor, la Galería de Hércules la Galería de los Cristales, el salón y la habitación de York, el salón y la habitación Luis XV, la sala del trono, además de cuadros, frescos, tapices y muebles.

Cada día 11.55 a. m. se realiza el cambio de guardia, que fue unos minutos antes de que nosotros ingresáramos y al que no llegué a filmar pero es muy entretenido. La plaza que lo rodea llamada Plaza del Palacio tiene como condimento unas vistas panorámicas inmejorables de todo Mónaco y especialmente de su famoso puerto de yates Hércules. 

Datos útiles: el 2 de abril al 31 de octubre excepto sábado y domingo el Gran Premio de F1.
Abril, mayo, junio, septiembre y octubre de de 10 am a 18 pm (última entrada 17:30h)
Julio y agosto: de 10h a 19h (última entrada a las 18:30h)
Cerrado del 1 de noviembre al 1 de abril.
Adultos: 8 euros 
Niños (8-14 años), estudiantes: 4 euros 
Se pueden comprar entradas reducidas de precios para visitar el Palacio junto con el Museo Oceanográfico y con la Colección de Coches del Príncipe.

Nosotros compramos el combinado de entradas para ver la colección de coches. Pero lo visitaríamos un rato después....

Le rocher

En el casco antiguo de Mónaco también hay mucho para apreciar. Para empezar, su fisonomía: se trata de una zona llamada “Le Rocher”, en español, “la Roca”, un monolito de 141 metros de alto que es la postal del principado.
Esta parte está llena de callejones, plazas importantes y edificios singulares como el Palacio de Justicia y la catedral de la ciudad. Está consagrada a  San Nicolas, y además de ser muy hermosa y cálida, es gratuita y muy lujosa. Allí descansan los restos del Principe Rainiero ( padre del actual monarca) y su esposa Gracia Patricia mas conocida como la bellisma Grace Kelly. 

En lo personal fue una visita que me recordó a mi madre que desde niña me contaba la romántica historia de la bellisima actriz de Hollywood y el príncipe que la enamoró. De algún modo uno va construyendo su historia con lo que nuestros ancestros nos legaron y estar allí me hizo recordar a mi madre y cuanto le hubiera gustado conocer aquel pequeño país. Viajar es también conectar el pasado con el presente y sentir que andamos por el mundo con aquellos que ya no están pero  siguen presentes. 
Nos detuvimos a comer algo en unos puestos del casco histórico donde los precios resultaron bastante buenos y en realidad para compensar el calor agobiante almorzamos unas exquisitas ensaladas de fruta con abundante agua mineral. 
Seguimos nuevamente camino, en este caso volviendo sobre nuestros pasos.

Colección de coches del Príncipe. 

Esta es una visita imperdible para alguien que ama los autos. Guarda en su interior los automóviles de propiedad de todos los príncipes de Mónaco. Muchos aún en uso porque puede que una mañana el Alberto II de Mónaco tenga ganas de andar con alguna reliquia. Cosas de príncipes que nunca viviremos los mortales comunes!
Es sabido que esta ciudad es sede de Formula 1 con un circuito en sus propias calles desde hace muchísimas décadas ( casi cien años) y es en el mes de Mayo. 
El museo está situado en las Terrazas de Fontvieille .  A finales de los años cincuenta, el príncipe Rainiero III, apasionado del automóvil, empieza su colección de coches antiguos. Con el tiempo la va ampliando, y el garaje del Palacio del Principado se queda pequeño para albergar a un centenar de magníficos automóviles deportivos, monumentales, con carrocerías majestuosas, capós rutilantes, carrozas reales.
En 1993 el príncipe Rainiero III toma la decisión de exponer sus tesoros al público.
Esta exposición única en el mundo, con una extensión de cinco mil metros cuadrados, reúne más de un centenar de automóviles; del De Dion-Bouton de 1903 al Lotus F1 de 2013, pasando por los Hispano Suiza, Rolls Royce, Lincoln, Facel Vega, Delage, Delahaye, Packard, Humber, Napier, Ferrari, Maserati, Lamborghini, Alfa Romeo, el Lexus de la boda principesca de 2011 etc... Además de los coches de carreras que han marcado el Rally de Montecarlo y los F1 del Grand Prix de Mónaco.
Es inexplicable lo que se siente ante algunos de los autos que marcaron la historia del automovilismo pero también de los que vimos en escenas emblemáticas de cine o en transmisiones de bodas reales. 

Datos útiles: Abierto todos los días de 10:00 a 18:00 (entrada permitida hasta las 17:30)
(excepto el 25 de diciembre)
Tarifas
- Adultos: 8 €
- Niños de 6 a 16 años / estudiantes : 4 €
Su sitio web oficial que es interesante de mirar antes de visitar.

Montecarlo : 

Continuamos nuestra caminata de subidas y bajadas importantes para encaminarnos a la famosa ciudad de Montecarlo famosa por su rutilante casino y su activa vida de lujos por doquier. 
La arquitectura del casino es una joya en si misma. Obra del arquitecto Garnier que, entre otros monumentos, ha realizado la Opera de Paris. 

Sin embargo nuestra mirada se perdía mirando los autos que ostentaban muchos de los asistentes al casino y de los valet parking a los que les brillaban los ojos cuando se subían para acomodarlo en alguno de los lugares disponibles. 
Aún habiendo visto autos increíbles en el museo , esto era la vida real e impresionaba aún mas. Sucedió un episodio que jamás olvidaré. Wally lo presencio completo ( yo ví solo el final). 


Primero observa una joven parada en la calle al lado del auto de lujo con un dinero en la mano y mirando distraidamente el entorno durante varios minutos , todo indicaba que iba a subir al auto  e irse manejando pero no lo hacía.....De pronto del Hotel de Paris, un cinco estrellas imponente, con una escalinata pequeña con alfombra roja enmarcada en columnas clásicas, viene corriendo desesperado un muchacho con uniforme del hotel y le abre la puerta. La chica le da el dinero, sube y se va manejando. Nunca jamás imaginé que alguien no abriera la puerta de su auto con su mano....he visto o leído en revistas o diarios acerca de esta situación en muchas cuestiones protocolares de reyes europeos pero así, en la vida cotidiana.....sinceramente me provocó una sensación de incomodidad....de vergüenza ajena si se quiere. Yo entiendo que la desigualdad es parte de este mundo. Pero toparte de frente con ella tan groseramente duele. Algo no hemos hecho bien los humanos para que millones de niños mueran de hambre fue lo único que me venía a la cabeza y sin ninguna cuestión ideológica mas que un profundo humanismo me sentí por primera vez en un viaje fuera de lugar, imposible de comprender aquello....El lujo y la ostentación así como su contracara es algo que quienes viajamos solemos ver por el mundo....pero Montecarlo nos mostró su lado mas superficial e inútil. 

Entramos luego al casino para visitar la parte donde no están las salas de juego pero que son de una belleza arquitectónica y artística digna de recorrer . El complejo del casino es un sistema de juegos de azar que incluye también el Gran Teatro de Montecarlo, una ópera y una casa de ballet, y la sede de los Ballets de Montecarlo.
Es claramente de estilo Beaux Arts, un estilo imperial relacionado con Garnier (parecido al de la Ópera de París) y también conocido como estilo Segundo Imperio o "estilo Napoleón III".
Al salir de allí recorrimos la plaza y una galería de marcas internacionales muy de élite. Seguimos  por el camino hacia el centro comercial y con destino a su estacion de trenes; entre joyerías y autos alemanes encontramos un Carrefour para comprar algo fresco y un poco de comida. 
De regreso en el tren bajamos en la estación Eze sur Mer con la intención de visitar el pueblo de Eze muy recomendado en redes sociales pero el bus que subía ya no pasaba. Eran las seis de la tarde y habíamos perdido el último: las opciones eran caminar durante 50 minutos en altura ( para luego volver a bajar ) o disfrutar un rato de la pequeña playa con un mar azul infinito que estaba a menos de cien metros de la estación. Adivinaron: nos fuimos a la playa y luego retomamos el tren a Niza donde pasaríamos la última noche antes de partir a la Provenza Francesa. 
Pero ello es tema del próximo post.!Ahora les dejo un vídeo de 3 minutos de un largo día en Mónaco!