"No hay nada como volver a un lugar que no ha cambiado para darte cuenta como has cambiado tu" Nelson Mandela
Basílica de Santa María Mayor (Basílica de Santa María Maggiore)
Construida sobre el antiguo templo pagano de Cibeles en el siglo IV por orden del Papa Liberio es la mas grande de las iglesias dedicadas a la Virgen María en Roma.
La leyenda dice que la virgen apareció ante el Papa indicándole las instrucciones para construirla y una nevada fue quien la diseño. Tuvo a lo largo del tiempo distintos nombres: Santa María de las Nieves ( por la nevada), Santa María Liberiana ( por el Papa), Santa María del Pesebre ( al recibir la reliquia del Santo Pesebre) y finalmente el nombre actual debido a su tamaño.
Tiene un interesante despliegue en arquitectura ya que se pueden encontrar desde los tiempos paleocristianos hasta el barroco. Hay que tener en cuenta que el edificio fue restaurado y reformado en el siglo XVIII por lo cual la fachada y parte de la decoración interior datan de ese período.
De todos modos conserva el campanario, algunos mosaicos y pisos de mármol del período medieval. Algunas columnas dóricas proceden de otros edificios de la Roma Antigua además de los extraordinarios mosaicos del siglo V que nos dejaron admirados.
La decoración de los techos se conserva desde el renacimiento mientras que las cúpulas y la capilla pertenecen al período barroco.
De algún modo esta basílica resume en su mistura todos los estílos arquitectónicos y del arte durante la historia del cristianismo lo cual la vuelve muy interesante.
Como era domingo por la mañana cuando llegamos estaba todo preparandose para iniciar la misa lo cual le dio mucha expresión a la visita ya que era notoria la presencia de romanos prevaleciendo sobre los turistas algo que en Roma es casi imposible de ver. Pero por otro lado la cantidad de gente impidió que pudieramos tener tranquilidad para observar la capilla que diseñara Miguel Angel y sobre todo los magníficos mosaicos.
Será que tendremos que volver!
Seguimos recorriendo Roma en el scooter y realmente nos es fácil describir la sensación de felicidad mientras atravesábamos sus barrios. Yo iba con la cámara en la mano tomando fotos y no lograba superar mi éxtasis. De pronto una limusina y el Coliseo, una muralla antigua, un carro tirado por caballos en el mayor caos de tránsito que creo haber visto, los árboles bordeando el Tíber, escultúras y edificios de la arquitectura mas variada desde lo clásico, lo barroco, lo humbertino, el medieval Trástevere el domingo por la mañana concurrido, alegre, cálido como sus callecitas y el Lungotevere Castello para ver el exquisito Ponte Sant Angelo e ingresar por la Via de la Conciliazione al Vaticano.
Paramos un rato en la Plaza de San Pedro para escuchar el final de la misa de Francisco pero pudimos ver una plaza repleta sobre todo de jóvenes de muchísimos lugares del mundo. El calor y el sol abrazaban fuerte. Nos sentamos un rato y un muchacho de aspecto africano nos puso en la mano dos pequeños animales de cerámica, una tortuga y un elefante mas precisamente. Nuestra primera intención fue decirle que no íbamos a comprar nada. Sin embargo en un español básico nos dijo que no quería nada. Que era muy feliz porque por primera vez en su vida había visto al Papa Francisco y tenía que "dar". Era su manera de agradecer. Como si eso fuera poco me regaló dos pulseras elásticas de mostacillas y ante la mirada atónita de nosotros nos abrazó y se fue. Lo vimos caminar y saltar feliz......mas allá de no profesar la religión cristiana pensé cuan bien podría hacerle al mundo la fe bien entendida. Seguramente este muchacho vive las dificultades de la vida real de un inmigrante en Europa pero la alegría de la fe lo hizo olvidar por un rato. Lo alcanzamos y le agradecimos profundamente con un abrazo.
He realizado un video con las fotos que ilustran nuestros dos días en scooter en Roma en la primavera del 2015 con la música de la película "A Roma con Amor" para que quienes conocen esta ciudad recuerden alguna de estas postales y para quienes no la conocen puedan disfrutar unos minutos de tanta intensidad romana.
Piazza Navona
Finalmente pasamos por la Piazza Navona que era un mundo de gente como siempre , este bellísimo y famoso lugar es una cita imposible de no concurrir cada vez que uno tiene la gracia de visitar esta ciudad. Datos mas específicos sobre la misma pueden buscar en este blog en nuestra primera visita en 2012 "Diario de Viaje: El primer día en Roma" (ver abajo de las crónicas sobre Vaticano)
Además de disfrutar de sus fuentes y sus artistas esta vez ingresamos a la Iglesia "Sant Agnese in Agone".
La iglesia de Santa Inés en Agonía (en italiano Sant'Agnese in Agone) es una iglesia barroca situada en Roma, Italia. Está construida frente a la Plaza Navona en el lugar donde la mártir cristiana Santa Inés fue martirizada en el estadio de Domiciano. Su construcción comenzó en el 1652 por los architectos Girolamo Rainaldi y su hijo Carlo Rainaldi; más tarde Francesco Borromini reemplazaría a los dos arquitectos y finalizaría el mismo las obras.
Cuando volvimos a salir a la plaza nos quedamos un rato escuchando un grupo de música y mirando las obras de los artistas plásticos callejeros que los hay muy buenos. Este es uno de los lugares de la ciudad que aunque el bullicio es enorme hay una sensación de espacio tan amplio que uno no quisiera irse nunca de allí.
He aquí un pequeño video para que me comprendan
Plaza de los Caballeros de Malta (Piazza dei Cavalieri de Malta)
Mientras comenzaba a atardecer subimos a la moto para dirigirnos hacia el barrio Aventino donde se encuentra una plaza muy poco conocida pero que resulta muy particular. Mas precisamente el interés del lugar está en mirar por el ojo de la cerradura del Palazzo Aventino del Priorato de Malta cerrado al público.
En el lugar bastante escondido por cierto se encuentra esta antiguo portal, apenas unas 20 personas haciendo cola frente a la misma, un puesto de bebidas y helados para refrescar a los pocos que se acercan a este lugar y siempre una persona mirando por el ojo de la cerradura.
Wally me preguntaba si era un chiste porque no sabía que iba a ver adentro. No es fácil sacar la foto. De hecho no lo logré nítidamente pero no los dejaré sin la bella imagen encuadrada en ese pequeño agujero.
Nadie sabe si fue realizado con intención aunque la mayoría se inclina porque fue un hecho fortuito, tampoco se sabe quien lo descubrió por ello es que este paseo es realmente misterioso. Lo cierto es que se ve claramente la imagen de la cúpula de la Basílica de San Pedro enmarcada en un camino de pinos.
Foto tomada por mi cámara |
Vista desde el ojo de la cerradura |
María Liberatrice a Monte Testaccio
Nos fuimos alejando mientras atardecía y nos perdimos en los alrededores de la ciudad sin GPS ni brújula. Solo viendo como caía la noche; en un momento nos cruzamos con una fiesta popular religiosa y no teníamos la menor idea donde estábamos. Era una hermosa iglesia frente a una plaza y la gente se agolpaba en la puerta para ver los fuegos artificiales que dibujaban el cielo. Nos bajamos de la moto y nos sumamos al gentío. En el frente de la iglesia como final de los fuegos se encendieron las letras de "María" y estallaron cual estrellas. La gente aplaudía sin parar. Era todo alegría y emoción. Es casi lo que mas me gusta de los viajes....es instante....en este caso sin saber donde era, quienes eran las personas que nos rodeaban, ni que se festejaba exactamente fuimos dos mas, fuimos parte, fuimos romanos y cristianos por unos minutos. Un rato después nos fuimos. Recién en Buenos Aires, mirando las fotos con el googlemaps cual rompecabezas desandando caminos logré ubicar ese lugar y esa iglesia. Tengan en cuenta que en Roma e incluso en sus alrededores hay hasta tres iglesias en cada cuadra o cada parcela....pero lo logré y cuando la encontré sentí que mi memoria emocional me devolvía el aroma de esa noche de primavera.
La iglesia se llama María Liberatrice y está en el barrio de Monte Testaccio.
En el time line de su facebook https://www.facebook.com/Maria-Liberatrice-a-Monte-Testaccio-54368171009/timeline/ puede verse si se busca la fecha un pequeño video de los festejos de esa noche del primero de junio. Sino pueden ver nuestro video que tomamos en vivo y en directo y comprender mi relato.
Al día siguiente viviríamos el último día de nuestra estancia en Roma antes de volver para tomar el vuelo hacia otros destinos. Esa noche cenamos tarde y dormimos como si nos acompañaran ángeles. Seguramente el universo parecía haber alineado los planetas para nosotros. Roma es un lugar donde sentimos que podríamos haber nacido, ese calor de hogar que no siempre se encuentra a miles de kilometros de donde uno ha nacido. Roma y su historia empiezan a ser parte importante de la nuestra.
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